MIEDO A LA CIRUGÍA? SEPA COMO ENFRENTARLO

Pasar por una operación siempre es una situación que preocupa y estresa a muchas personas y su entorno más cercano. El quirófano, la anestesia y el temor a lo desconocido suelen ser las principales causas de este miedo.

Es perfectamente normal sentir nervios antes de una cirugía, especialmente si nunca te sometiste a una cirugía o nunca estuviste mucho tiempo en los hospitales.

A continuación algunos datos y sugerencias para enfrentar estos temores:

Expresa tus temores

“La mayoría de las personas sienten nerviosismo acerca de aquello que desconocen o no comprenden”. “Cuanto más le comentes al médico acerca de tus miedos, más información podrá brindarte para tranquilizarte”.

Si el médico sabe específicamente a qué le teme un paciente, es más fácil brindarle ayuda durante el proceso. Por ejemplo, si le temes a la colocación de una vía endovenosa en la mano, el médico puede asegurarse de que te administren un sedante, un anestésico local en la piel, o simplemente que una enfermera te acompañe durante el procedimiento para brindarte apoyo.

“Si puedes decirnos qué te causa temor”, podemos encontrar una forma de ayudarte. Pero si no expresas lo que sientes, con frecuencia el miedo se amplifica.

Técnicas complementarias o psicosomáticas para reducir el estrés

1.   En muchos pacientes, la hipnosis, los masajes y el yoga ayudan a reducir la ansiedad y el estrés.

2.   El miedo al quirófano se genera de un temor a lo desconocido. Ten presente que un médico es también una persona igual que tu, y que está preparado y entrenado para buscar tu bienestar,  proteger tu salud y cuidar tu vida.

3.   Lo primero que hay que hacer desde que se empieza un tratamiento médico-quirúrgico, es buscar la calma, sosegarse y comprender que las cosas no siempre son como uno se lo imagina, generalmente tendemos a exagerar una situación producto de nuestro desconocimiento.

4.   Los médicos también están preparados psicológicamente para acercarse al paciente, explicarte tu enfermedad y los riesgos que se corren, el trabajo que se hará en el quirófano y el objetivo que se va conseguir.

5.   Uno de los temores generalizados en los pacientes, es el temor a la anestesia, específicamente a no despertarse. El hecho de perder el control de uno mismo, asusta. Pero tienes que pensar que todos los aparatos tecnológicos y el equipo médico te estará controlando y monitoreando permanentemente.

El avance tecnológico y la técnica han disminuido los riesgos.

1.   En la actualidad las técnicas de cirugías estan muy perfeccionadas y altamente controladas. Lo que permite brindar a cada paciente una seguridad extraordinaria con pocos riesgos, que aunque siempre existen, son cada vez mas improbables.

2.   Los riesgos han disminuido gracias a la tecnología aplicada a la medicina, a la cirugía y a la anestesia. Cuando un paciente está anestesiado está perfectamente controlado, hay un equipo de apoyo que controla todas sus variables. Si sucede algo, el anestesiólogo y los médicos lo ven enseguida y pueden aplicar el tratamiento necesario de inmediato.

3.   Uno de los temores generalizados en los pacientes, es el temor a la anestesia, específicamente a no despertarse. El hecho de perder el control de uno mismo, asusta. Pero tienen que pensar que todos los aparatos tecnológicos y el equipo médico lo estará controlando permanentemente.

4.   El avance tecnológico ha logrado ahorrar los tiempos en el quirófano y los días de recuperación, hoy en día se utiliza menos anestesia que años atrás. Incluso algunas cirugías que antes requerían días de recuperación, hoy en dia gracias a la tecnología laparoscópica se han vuelto casi ambulatorias, pues son menos invasivas al cuerpo humano.

Si bien el riesgo persiste, pero hoy en día es muchísimo menor y la esperanza de vida y buena salud mucho mayor.

La cirugía laparoscópica es menos invasiva

La laparoscopia es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que permite realizar intervenciones sin necesidad de una cirugía abierta.

La operación es la misma, pero ahora la agresión al organismo es menor. No se hace una incisión para poder acceder a la zona, por lo que se requiere menos anestesia, es menos agresiva… la vía de acceso es diferente, aunque la técnica es la misma.

No es que sea una operación de menor importancia y gravedad, pero necesita un manejo distinto y un tipo de anestesia diferente, lo que va a repercutir en el bienestar y en la recuperación más rápida y mejor del paciente.